Análisis de Brink Artículo por alex, el 16-05-2011
El nuevo proyecto de Splash Damage se daba a conocer en el E3 del año 2009 con unas pretensiones excesivamente ambiciosas. Los creadores del título auspiciado por Bethesda fijaban su objetivo en lograr una auténtica revolución del género de acción en primera persona, en acuñar elementos innovadores que marcaran un antes y un después en la monótona tónica habitual. Tal fue el atrevimiento de Paul Wedgwood, uno de los padres de Brink, que llegó a afirmar en una entrevista que prefería caer en la quiebra antes que dar a luz a un título banal. Una aparente declaración de intenciones. Con paso ligero Brink estaba siguiendo los pasos pertinentes (y muy recurridos actualmente) para crear una expectación importante dentro del público. Una expectación que hubiera caído en el más absoluto desaire si detrás de la presentación de dicho título no hubiese aparecido el nombre de Bethesda, santo y seña de esta generación. El tiempo de espera ha terminado. La obra de Splash Damage ya está en nuestras manos, no cabe instante ni para la más nimia rectificación, ni para la más ligera de las exhalaciones. Es hora de conocer hasta dónde han llegado las promesas.. Para leer el artí completo pulsa
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