Argumento
La trama de este Army of Two: the 40th day, sucede esta vez en Shangai, en vez de alrededor del mundo, como pasaba en el Army of Two anterior. En esta parte, Ríos y Salem, bajo mandato de la empresa militar TransWorld Operations deben realizar una misión secreta junto con un extraño soldado. De repente algo empieza a ir mal, ya que todo empieza a explotar a su alrededor, incluso los aviones caen, y el caos se expande. Debemos saber quien ha provocado este caos y, sobre todo, por qué estamos nosotros en mitad de todo este lío.
Jugabilidad
La mecánica de Army of Two, es la simplemente la de un videojuego de acción, sigilo y cooperación. Se basa, casi exclusivamente en avanzar, disparar, cubrirse, ir despacio y llamar la atención de los enemigos para atacarlos por otro flanco. Interesante es este último ejemplo, ya que cuando disparas haces ruido e irremediablemente atraes la atención. Para controlar el nivel de ocultación, contaremos con un medidor que cambiará de color y sabremos si Salem o Rios están siendo atacados por los enemigos. Cuando esto pase y un enemigo se encuentre en el punto de mira, el medidor del otro se volverá azul y pasará desapercibido, pudiendo rescatar a nuestro compañero de una muerte inminente.
Con todo esto, podemos decir que el juego sienta sus bases en la inteligencia artificial y su sistema cooperativo. Por ello, muchas veces notaremos que las acciones de nuestro compañero no son todo lo acertadas que quisiéramos y que a veces, echa a perder toda una estrategia basada en el sigilo por atacar cuando menos lo esperamos. En esta parte, es cuando echamos de menos un compañero humano y aquí, las cotas de diversión son verdaderamente altas.
Jugar con otra persona sigue siendo lo más interesante de Army of Two, aunque la experiencia para un solo jugador no nos dará la sensación de un juego limitado, pero la propuesta más interesante y divertida, es sin duda, el modo cooperativo.
La IA está muy bien medida, y los enemigos son duros. Reaccionan y se comportan según lo que está sucediendo; incluso nos atreveríamos a decir que su inteligencia artificial ha mejorado tanto o más que la del compañero controlado por la máquina, y por eso jugar dos personas es gratificante: porque hay un reto y no se tiene la sensación de pasar como una apisonadora sobre ellos.
Otra opción importante, es la de personalización de las armas. Esto implica que podemos realizar casi cualquier arma, con cualquier elemento que dispongamos, pudiendo montarnos una bayoneta casera, con un cuchillo o un destornillador y lo mismo si conseguimos una mirilla, o un silenciador. Pero además de crear nuestra arma a nuestro antojo, las características de éstas harán cambian su rendimiento y utilidad del arma. Así unas aportarán más potencia de fuego que otras, según le añadamos nuevos elementos. Incluso sonarán diferentes.
Pero si no podemos fabricar el arma soñada, siempre podemos adquirir nuevas en la tienda. Podremos acceder a ella, en cualquier momento, siempre y cuando no estemos en mitad de un combate, entrando en un menú desde el que comprar y personalizar armas. Las hay de cuatro tipos: principales (metralletas, rifles, shotguns…), secundarias (pistolas) y especiales (rifles de francotirador, RPG…) y accesorios.
Esto se acentúa con un sistema de recompensa por recolección de objetos. El cual dotará al juego de mayor tiempo de vida, invitando a la rejugabilidad, para adquirir todos los objetos que se encuentran ocultos en el mapa, entre los que encontraremos verdaderas mejoras para nuestras armas.
Se ha mejorado mucho más el GPS, dándonos en cualquier momento, el lugar exacto en el que se encuentra nuestro compañero, con señales más claras que en el juego anterior.
Esta vez, la acción, además de centrarse en un solo momento y sitio, en vez de en diferentes años y lugares como en la versión anterior, se ha estructurado en capítulos, durando la campaña, en modo historia, a penas seis horas.
El modo multijugador se ha alejado bastante del modo historia, pero los equipos cooperativos a dúo siguen siendo clave, con tres propuestas diferentes que pueden unir hasta doce jugadores simultáneamente. Para ello contaremos con un multijugador por objetivos dinámicos, que van cambiando sobre la marcha (Warzone); un rey de la colina (Control), el de todos contra todos (Deathmatch) y el Extraction. Este cuarto modo de juego multijugador sólo permite cuatro participantes, y es un survival, en el que tendremos que aguantar el ataque de hordas de enemigos, por lo que los cuatro deben colaborar para aguantar lo máximo posible.
Gráficos
A nivel gráfico, técnico y artístico, el juego ha mejorado desde su primera parte. Se nota un mejor uso del normal, de los decorados interactivos, y sobre todo, de las animaciones. Aún así, el cambio no es brutal, ya que la primera parte portaba un muy buen nivel gráfico en todos sus apartados. Pero esta vez, como nos moveremos más por escenarios interiores, se han centrado un poco más en el uso de luces y sombras, creando de esta manera, mejor efectos volumétricos y texturas más conseguidas.
Sonido
La música en sí, es la típica en estos juegos de acción, manteniendo la intriga cuando estamos entrando en una zona inexplorada y siendo cañera cuando estamos en mitad de la acción, pero si en algo destaca el sonido, es por la calidad de sus voces y lo bien interpretadas que están en perfecto español. Es fantástico escuchar las conversaciones entre Salmen y Rios, con un humor irónico y algo negro.
Conclusión
Army of Two: the 40th day, es un videojuego que es ideal para jugarlo con otro compañero y pelearse a través del auricular con micrófono en xbox live. Jugándolo en solitario, las sensaciones también son buenas, pero no llega a las cotas de diversión que jugándose de forma cooperativa. El modo multijugador no está nada mal, pero el modo historia, se nos hace un poco corto. Salem y Rios son dos tíos realmente carismáticos y sus conversaciones serán de todo menos aburridas, aumentado aún más el magnífico doblaje que lo acompaña. Si te gustó el primer Army of Two, este no te defraudará en absoluto, e incluso tendrá todo eso que le pedías al primer videojuego. En cambio, si no te gusta este tipo de juegos, quizás te parezca más de lo mismo.