Análisis publicado el 22-07-2014 por Zarten.
Nadie duda que Watch Dogs es el primer gran juego de la nueva generación de consolas. Anunciado por primera vez en el E3 2012 con unos gráficos espectaculares y una jugabilidad ligeramente original, este título de Ubisoft ha llegado este año a las nuevas consolas con una de cal y otra de arena.
Ambientado en una ciudad de Chicago controlada y vigilada en su totalidad por el gobierno de los Estados Unidos, Watch Dogs nos pone en la piel del hacker Aiden Pearce, un tipo que intenta vengar la muerte de su sobrina en una lucha contra la mafia y el mal corrupto que asola la ciudad, convirtiéndose en una especie de justiciero.
Siendo sinceros y yendo directamente al grano, Watch Dogs se presenta como un sandbox al estilo Grand Theft Auto que quiere pero no puede. Sus posibiliades son enormes, y la gama de movimientos y acciones son muy amplias. Sin embargo, hay ocasiones en las que la libertad se ve recortada, quitando esa sensación de poder hacer lo que a uno le venga en gana cuando le venga en gana. El juego, como es de esperar, se basa principalmente en la acción, el sigilo y la conducción, intercalado con algún que otro detalle original que os cuento a continuación.
Ahora bien, en este tipo de juegos donde lo importante es la libertad y el grado de diferenciación se ve prácticamente reducido a la historia que se quiera contar, Ubisoft ha sabido dar un golpe en la mesa. Como elemento distintivo y único para el juego, nuestro protagonista, como buen hacker, es capaz de entrar en el sistema de control y vigilancia de la ciudad, pudiendo hackear todo tipo de dispositivos electrónicos y así alterar o influir en su comportamiento. De esta forma, podremos usar cámaras de vigilancia para nuestros objetivos, manipular semáforos, crear distracciones, cortar comunicaciones, conseguir dinero, etc. Las posibilidades son muchas, pudiendo pensar incluso a lo grande, dando la sensación de que se tiene un control total sobre la ciudad. Además, estas habilidades podrán ser usadas en cualquier momento y aspecto del juego, ya sea en medio de la acción, de la conducción, de la vigilancia o de la búsqueda de información.
El juego incluye también elementos clásicos de compra/venta, tanto de vestimenta como de armamento (con un catálogo bastante amplio, por cierto), y nos da la posibilidad de controlar casi cualquier vehículo, incluyendo coches, motos, camiones, barcos, etc., aunque hay que decir que no existe demasiada variedad y que las físicas distan mucho de ser lo deseado. También se ha incluido una especie de "tiempo bala" para ralentizar el tiempo, y existe un árbol de habilidades bastante completo que podemos ir mejorando según avancemos en el juego.
Otro de los aspectos principales de este tipo de juegos es su duración, que debido a la libertad proporcionada puede extenderse hasta el infinito. En este caso, contamos con una serie de misiones principales ligadas a la historia principal que se pueden completar en torno a las 15-20 horas. Pero como ocurre en prácticamente todos los títulos, existen una gran cantidad de retos, misiones secundarias, objetivos y objetos escondidos que elevan la duración más allá de las 100 horas. A patir de ahí, el juego durará lo que el jugador quiera que dure.
A esto último ayuda la inclusión de cinco minijuegos, o los extraños viajes digitales, cosa de difícil explicación que es mejor jugar para entender. Y por si no fuera suficiente, Watch Dogs incluye también un completo y maravilloso modo multijugador en el que hasta 8 jugadores pueden participar online de forma simultánea integrándose en el modo campaña, ya sea para ayudar, estorbar o competir, todo ello dividido en diversas modalidades. Mención especial para el modo Desafío de ctOS Mobile, en el que un jugador puede usar la app gratuita para smartphones y tabletas que le permitirá controlar a la policía, mientras otro jugador intentar escapar.
Hablando del aspecto técnico, nos encontramos con el punto más polémico del título. Debido a una serie de requisitos, falta de tiempo y otros detalles que no han trascendido, la calidad gráfica mostrada en el E3 se ha visto reducida considerablemente, pasando de un prometedor portento gráfico a un juego de nivel medio que no desmerece, pero que tampoco despunta ni sorprende (y además lleno de bugs). Cuenta con aspectos realmente positivos como la detallada y concienzuda recreación de la ciudad de Chicago, pero con errores espeluznantes en físicas e inteligencia artificial. A esto hay que añadir ciertas bajadas de resolución y tasa de fps, junto al hecho de que haya zonas a las que no se puede acceder pese a la supuesta libertad total. Pero que esto no lleve a engaño, porque aunque la decepción haya sido mayúscula, el resultado final es muy positivo.
Y lo cierto es que todo esto es una lástima, porque Watch Dogs es un gran juego, muy completo y con bastantes elementos originales que se han visto desmerecidos por lo que se prometió y finalmente no se pudo brindar. Su apartado sonoro es de sobresaliente, y cuenta con un fenomenal y completo doblaje al castellano, acompañado de una genial banda sonora compuesta por temas de bandas como Weezer, The Smashing Pumpkins o Vampire Weekend. Lamentablemente, el usuario, aunque disfrute, se va a quedar con esa sensación de engaño, de que lo que le vendieron no es lo que compró. Sin embargo, como al final lo que cuenta es la diversión y pasar un buen rato, y este juego consigue cumplir con eso sin demasiado esfuerzo, creo que se puede decir que este primer gran lanzamiento de la nueva generación de consolas ha estado a la altura.
