La curiosidad que rodea a Rush Bros se sustenta en un concepto cuya ejecución, nefasta, no ha conseguido distinguirlo como un título irrepetible. Y es que, dependiendo de la biblioteca musical que elijamos, los elementos de los escenarios responden con mayor o menor violencia siguiendo su ritmo. El problema es que esta idea, brillante en la teoría, no pasa por dejar breves repercusiones prácticas pocas veces en sintonía con la lista de reproducción que hemos elegido.
Para compensar una jugabilidad offline más mala que buena, se encuentra el enfrentamiento con otros seres humanos, modo en el que competiremos contra nuestros rivales para alcanzar la meta final, simplificándose considerablemente todos los demás elementos que componen este título. Tenemos dudas sobre si el multijugador de Rush Bros es bueno por su propio diseño o por el mero hecho de poder competir con otras personas y superar la somnolencia de su campaña para un jugador.
Su precio puede parecer barato a simple vista (unos 9,99€), pero cuando experimentamos lo que ofrece se nos antoja un precio excesivo. Pese a que en los últimos años el género de las plataformas está siendo uno de los menos productivos de la industria, no podemos recomendar este título a absolutamente nadie. Tal vez si alguno de nuestros lectores es un admirador empedernido de los plataformas pueda encontrar algún tipo de placer en él. De lo contrario, es mejor alejarse lo máximo posible.