Análisis publicado el 20-04-2005 por Raven.
¡¡Legionarios!! El orgullo del Gran Imperio Romano está en vuestras manos. De vosotros depende que esos asquerosos bárbaros regresen de donde nunca debieron salir. Roma nos necesita más que nunca, luchemos por ella y demostrémosles una vez más de que está hechas nuestras espadas y nuestros pillums.
La saga Imperium
Hace ya 3 años que los chicos de Haemimont Games lanzaron el primer Imperium. Este juego de estrategia, heredero directo de la saga Tzar, que nació sin demasiadas pretensiones, logró hacerse un hueco en el complicado mundo de la estrategia en tiempo real. En aquellos momentos, la aplicación de conceptos como que las tropas pasaran hambre y la necesidad de establecer rutas comerciales entre nuestros asentamientos para evitarlo resultaron ser toda una novedad. Así mismo la inclusión de un mapa a pantalla completa, accesible a nuestra voluntad mediante un atajo de teclado, supusieron un soplo de aire fresco en los ya tan saturados campos de batalla de nuestros ordenadores.
Su continuación, a parte de cambiar las Galias por Hispania, fue una revisión del mismo. Se mejoró el interfaz de manejo de los ejércitos y se incorporaron nuevas funcionalidades y características especiales a las unidades, conservando, eso sí, el mismo motor gráfico. Como novedad, también incluyeron un sistema automático de actualizaciones para poder estar al día de todas las novedades que surgían en la comunidad Imperium.
La tercera entrega que nos llega a las manos es una vuelta de tuerca más, ahora añadimos a todo lo anterior nuevas características, como por ejemplo el hecho de que nuestros héroes puedan subir de nivel sus características personales y que todos aquellos soldados que luchen bajo su mando podrán participar de ellas. En conjunto, podríamos decir que el juego es más de lo mismo y la ausencia de una campaña propiamente dicha hace pensar que se trate más de una expansión de la entrega anterior que de un juego en si.
Historia
Historia es precisamente de lo que se trata, rememoraremos 12 de las grandes batallas que acontecieron al Imperio Romano a lo largo de 5 siglos; bien desde su perspectiva, o de la de las civilizaciones a las que se enfrentaron.
Desde el primer momento todas las batallas estarán disponibles, pudiéndolas jugar en el orden que más nos apetezcan. Así en las 6 primeras tomaremos el mando de los ejércitos de Roma contra los insurgentes y en las 6 últimas nos enfrentaremos a todo el poder del Imperio.
Si la historia tal y como se escribió no nos gusta, siempre podremos entrar en el modo conquista e intentar cambiarla. Aquí podremos seleccionar cualquier civilización, y con el mapa del mundo conocido delante, atacar a todas las demás y llevar a los nuestros hacia la gloria.
Desde el punto de vista de las civilizaciones, tenemos mucho donde elegir. Así nos encontraremos con el Egipto de Cleopatra, la Germania de Arminius, la Bretaña de Boadicea, la Hispania de Viriato, el Cartago de Anibal, la Galia de Vercingetorix y por supuesto el fastuoso Imperio Romano, el cual viene presente como 2 civilizaciones en sí, la Roma republicana y la Roma imperial; cada una de ellas con sus respectivas unidades, por ejemplo, los tribunos del período republicano y la guardia pretoriana del imperial.
Gráficos
El motor gráfico utilizado es el mismo que se utilizó en las dos entregas anteriores, muy lejos de lo que estamos acostumbrados en la actualidad. Los mapas son en 2D y no hay posibilidad de hacer zoom o de rotar la cámara. Aún así cumplen su función perfectamente y presentan una gran variedad de ambientes; al fin y al cabo, no es lo mismo luchar en las verdad praderas galesas que en los áridos terrenos cartagineses. En cuanto a las unidades, tanto de lo mismo, aunque eso no impide que sean ricas en detalles intentado imitar a las de las civilizaciones a las que representan.
Música/Sonido
La banda sonora del juego, sin llegar a ser una maravilla, acompaña a todas las acciones que están ocurriendo en pantalla; respecto al tema de los efectos de sonido, podríamos decir que es correcto. Cada unidad suena de una manera característica y cuando les mandamos combatir se puede oír el choque de las espadas en medio del fragor de la batalla, el galopar de nuestros jinetes o a los arqueros lanzar sus flechas. La pega llega cuando juntamos a muchas unidades en pantalla, llega un momento que todas las batallas suenan igual independientemente de las unidades que tengamos y del numero de ellas que participen.
Jugabilidad
Aquí es donde encontramos la clave de su éxito, una vez hemos tomado conciencia de nuestra misión, la partida resulta muy adictiva. A esto ayuda una IA muy acertada en sus decisiones, y que dependiendo de la civilización que controla, planteará sus ataques de maneras distintas. En este punto es donde se echa de menos el tener una campaña unida argumentalmente que te invite a seguir jugando, ya que una vez terminada una gran batalla no hay nexo de unión con la siguiente.
Edición española
Como ya nos tiene acostumbrados FX, la edición española es sublime. Todos los textos que aparecen en la pantalla están doblados a nuestro idioma perfectamente. En cuanto al trabajo de doblaje, decir que no se le puede sacar ninguna pega. El juego viene en una caja tipo DVD en el que nos encontramos, aparte del CD de juego, un abultado manual a todo color de 86 páginas y un desplegable con todas las unidades del juego.
En resumen
Si eres un fan de las otras entregas de Imperium o si andas buscando un juego para introducirte en la estrategia en tiempo real, este es tu juego; pero si andas buscando algo más acorde con los tiempos actuales será mejor que pienses en otros títulos.
Lo mejor: Su facilidad de manejo, una gran jugabilidad, una estupenda adaptación a nuestro idioma y el precio.
Lo peor: Al apartado gráfico se le notan mucho los años. La falta de una campaña dinámica.
