Cuando el comecocos era el rey
Los nacidos entre los años 70 y 80 seguro que recuerdan haber echado unas monedas en máquinas recreativas en las que aparecían unos gráficos primitivos (evidentemente, no para aquella época) y en los que el objetivo era esquivar a los odiosos fantasmas, acabar con todas las naves espaciales enemigas o quedar primero en una carrera de Fórmula 1. Era el auge de los salones de juego y el comienzo de lo que sería el paso final hacia el entretenimiento electrónico. Namco tenía la mayoría de los “bombazos” de la época y debido a ello no deja de sacar recopilatorios con varios de sus clásicos, como es el caso de este Namco Museum 50th Anniversary. En él nos podemos encontrar juegos como Pac-Man, Bosconian, Galaxian o Pole Position, auténticos objetos de culto para los “jugones” de la época.
Jugabilidad
Fácil de aprender, difícil de dominar. Esta era la premisa fundamental para que un juego enganchara al instante. Tenía que ser sencillo de entender, pero se necesitaban horas y horas (y en consecuencia monedas y monedas) para llegar a ser el número 1.
Los 16 juegos contenidos en este pack recopilatorio (14 iniciales más otros dos, Galaga ’88 y Pac-Mania, que se desbloquean al conseguir ciertas cantidades de puntos en algunos juegos) cumplen a la perfección con esta filosofía. En todos es relativamente fácil pasar la primera fase, pero conforme va pasando el tiempo la dificultad va aumentando de manera exponencial hasta llegar a ser un verdadero reto (más bien prácticamente imposible) superar las fases finales. Así era entonces y así es ahora, ya que los juegos son idénticos a su versión original, salvo en las diversas opciones de configuración, como la dificultad o los controles, que, evidentemente, no aparecían en las recreativas.
Gráficos
Lo primero que nos llama la atención es la interfaz. Se nos presenta una especie de sala recreativa virtual en la que tenemos las máquinas y podemos elegir en cual de ella queremos jugar. Y aquí se acaban las sorpresas. Todo lo demás es idéntico a cuando realmente estábamos delante de ellas. Lo único que se nos permite cambiar es el modo de pantalla. Bueno, queríamos realismo, ¿no?
Música / Sonido
En este apartado nos encontramos ante una situación idéntica a la anterior. Los sonidos y músicas que aparecen en los diversos juegos son aquellos que nos fascinaron en su época, pero que sin duda a alguien que no lo vivió en su momento le parecerán prehistóricas. En este título es la nostalgia la que manda.
Edición española
Namco Museum 50th Anniversary viene traducido en lo buenamente posible, es decir, interfaz y poco más, ya que los juegos se han conservado tal cual eran en su momento, y en aquella época todo estaba en inglés (si bien tampoco es que hubiera mucho que entender). El manual es completo e indica las instrucciones necesarias para poder comprender la dinámica de todos los títulos contenidos en el disco, que viene presentado en la típica caja de DVD característica de PS2.
Conclusión
Es evidente que Namco Museum 50th Anniversary es un juego pensado fundamentalmente para aquellos nostálgicos que quieran revivir sus tardes de gloria en las recreativas. Lo más probable es que un profano en la materia se aburra a los 15 minutos de haber empezado a jugar, aunque nunca está de más echar unas partidas a los clásicos que marcaron una época.
Lo mejor: absolutamente todo es igual a la versión original de los juegos.
Lo peor: juego sólo recomendado para jugadores de 20 años o más.