Análisis de Drakensang: The Dark Eye (PC)
Fecha de lanzamiento: 29 de mayo del 2009
Características: PC-Rol-3º persona-Medieval-Fantástico
Distribuidor: FX Interactive
Productor: FX Interactive
Desarrollador: Radon Labs
Precio: 19,95€
Manual: Castellano.
Textos: Castellano.
Voces: Castellano.
Código PEGI: 12+
Web oficial: Disponible
Requisitos: Windows XP / Vista Pentium IV 2,4 GHz 1,5 Gb de memoria RAM 9,5 Gb de espacio libre en el disco duro Tarjeta gráfica de 256 Mb (NVidia FX 6600 o superior, ATI Radeon X800 o superior) Lector de DVD-ROM Tarjeta de sonido
Jugabilidad
Para controlar a nuestro personaje, utilizaremos la típica combinación de tecleas “WASD”, el uso del ratón y alguna tecla más de acceso rápido. Realmente los personajes se manejan bastante bien; sobre todo si nos movemos por espacios abiertos. El problema surge al movernos por espacios más cerrados, interiores o catacumbas, pues la cámara nos jugará malas pasadas, teniendo que hacer muchas veces uso de la pausa para centrarla de forma manual y así evitar que nos entorpezca la vista de la acción. Si además los personajes de nuestro grupo están lejos del personaje principal, la sensación de caos no puede ser más completa.
A la hora de combatir, un elemento de lo más interesante es el uso de la “Pausa Táctica” para organizar y planificar nuestros ataques, defensas, pociones y sobre todo, poder subir los atributos de los personajes con la experiencia conseguida. Además de elegir nuestra táctica de combate, defensiva, ofensiva o neutra; este elemento lo usaremos más de una vez, sobre todo con los enemigos finales, los cuales son únicos (cosa que se agradece bastante) ya que con los pequeños enemigos no son necesarios.
Una cualidad que poseen nuestros personajes es la de recargar su energía después de un combate, salvo si nos quedan infecciones o heridas demasiado graves, para las cuales debemos hacer uso de las vendas y un buen nivel en curación. Además, la "Pausa Táctica" facilita el control directo sobre los personajes que acompañan a nuestro Avatar, marcando las órdenes de forma individual o colectivamente pudiendo realizar una estrategia de defensa, ataque en cada turno de combate (o tirada de dados) lo cual gana muchos enteros librándonos del cansino mata-mata (y de la torpe inteligencia artificial de la que muchas veces hacen gala). De ahí la importancia de crear un grupo lo más equilibrado posible como anteriormente comentamos.
Pero si después de una estrategia equilibrada, vemos que a nuestros compañeros y a nuestro Avatar les están dando por todos lados, siempre tendremos la opción de correr y huir de nuestro enemigo, para luego, con unas pociones y unas vendas, podamos volver a retomar el combate.
Nos gustaría mencionar especilamente el uso de la artesanía, en la que nos podremos especializar en herrería y crear espadas, cuchillos, lanzas, en crear arcos y flecha y en alquimia. Lejos de ser un simple añadido, personaliza completamente a nuestros personajes y haremos uso de estas habilidades casi todo el tiempo.
El argumento empieza muy bien, nuestro personaje siente la necesidad de ayudar a un amigo tras recibir una carta suya llena de desesperación, pero empieza a decrecer con el paso del tiempo sumiéndose en los tópicos de cualquier juego de rol, con buenos buenísimos y malos malísimos. El guión está estructurado de tal forma que impide la libertad de movimientos del jugador, llevándolo siempre a las misiones que nos proponen para ese nivel y no pudiendo investigar nuevas zonas del mapeado sin antes haberlas acabado. Esto no tiene que se malo, pues muchos jugadores prefieren un sistema de juego más cerrado y centrado en el argumento que la absoluta libertad sin apenas líneas argumentales y todo lleno de mini-misiones. Aún así, siendo de un sistema más cerrado (tipo Baldur"s Gate) cuenta con bastante horas de juego, pudiendo acabarse entre las 40 y 50 horas para un experto Rolero y durar más de 100 para un Rolero novel.
Nuestra conclusión
El juego no es perfecto y tiene fallos, pero encontrando lo que encontramos hoy en día en el mercado, es más que aceptable. La localización al español es sobervia, la presentación, como FX nos tiene acostumbrados, es magnífica. Aún así, el juego nos da sensaciones de "deja vú" demasiado frecuentes y es que se repiten demasiados patrones, personajes, enemigos y líneas argumentales de otros juegos de Rol. Así unas veces nos recuerda a Oblivion, otras a Baldur"s Gate y otras a Neverwinter Nights con damasiada fecuencia y nos parece un refrito, un refrito delicioso eso sí.
