Hoy en día, un shooter sin apartado multijugador es un título destinado al fracaso, por muy buenas maneras que apunte. Si el modo para un solo jugador se caracteriza por contar con escenarios relativamente abiertos y mucha libertad, algo que también ocurría en el multijugador del Crysis original, en el apartado online de esta secuela han decidido optar por todo lo contrario.
Pero esto no tiene por qué ser algo malo. Es más, Crytek quería un multijugador por todo lo alto, y bien es cierto que lo han conseguido. Para ello, contrataron a un estudio entero, Free Radical Design, para destinarlo única y exclusivamente a tal tarea. La remodelación con respecto a lo visto en la primera entrega fue completa, empezando por prescindir de los puntos de prestigio y añadiendo un sistema de rangos hasta nivel 50 con cuatro clases disponibles (asalto, artillero, francotirador y explorador). Pero vamos, que esas clases tampoco son definitivas, puesto que el jugador puede crearse la suya propia combinando los armas y los componentes que quiera.
Hasta aquí, nada que no hayamos visto en los últimos shooters del mercado, pero hay que tener en cuenta que Crysis 2 cuenta con un elemento único, el nanotraje. El nanotraje nos da habilidades por tiempo limitado (lo que nos dure la energía) que pueden aportar el plus que nos haga salir airosos de un enfrentamiento. La fortaleza, la invisibilidad o la visión infrarroja son factores muy a tener en cuenta que dan un aire muy peculiar a las partidas multijugador.
Otro añadido es el de las bonificaciones que recibimos por matar a los enemigos, que se traducen en puntos por recoger las insignias (personalizables y desbloqueables) que dejan caer estos, que también nos darán ventajas como poder ver a los enemigos en el radar, apagar el traje de los oponente o lanzar un ataque aéreo. Esto viene a ser como el nuevo modo incluido en Call of Duty: Modern Warfare 3, en el que no recibimos experiencia si no recogemos las chapas que deja caer el muerto, todo ello ideado para poner las cosas más difíciles a los jugadores que les gusta actuar como francotiradores.
Haciendo resumen, el multijugador de Crysis 2 cuenta con seis modos de juego diferentes, los típicos, aunque a veces con un punto de vista diferente. Si les sumamos las características únicas y las variaciones con respecto a otros juegos, tenemos al final un modo multijugador suficientemente familiar como para sentirnos cómodos, y suficientemente distinto como para llamar la atención.
¿Y el apartado técnico qué? Que para algo es un Crysis...
Supongo que una de las mayores incógnitas previas al lanzamiento del juego era ver si Crysis 2 supondría un boom técnico como ocurrió con su predecesor. La cosa estaba complicada, puesto que nos encontramos al final de una generación en la que queda poco por explotar, y hay que tener en cuenta que el juego iba a llegar a PC y consolas. El impacto no ha sido el mismo, pero en Crytek han sabido colocar a esta secuela entre los juegos con mejores gráficos de la generación actual.
En primer lugar, hay que decir que el motor CryEngine 3 ha cumplido mucho y muy bien, incluso dando el salto a la multiplataforma. Si separamos, y como puede resultar obvio, la versión para PC está un escalón por encima que la de consolas, fruto de las diferentes resoluciones y detalles en las texturas. La potencia es la potencia, y un PC hoy en día gana por goleada.
Dejando las comparaciones a un lado, tenemos que la ambientación y recreación gráfica de una Nueva York en decadencia, invadida y que se cae a pedazos está perfectamente lograda, todo con una calidad de detalle y modelado espectaculares. Todo resulta inmersivo y creíble, que al fin y al cabo es lo que cuenta, y se nota en cada aspecto del escenario, gracias a la amplitud y la interactividad. Y lo mejor de todo es que el motor gráfico es tan potente que ni siquiera es necesario contar con cinemáticas para ciertas escenas de acción específicas.
Pero no solo los gráficos son buenos. También hay que tener en cuenta añadidos como la iluminación, las sombras, el fuego, el agua, las animaciones, las físicas y hasta la IA de los enemigos, que actúan en consecuencia casi como lo harían en la realidad.
Si hasta ahora todo tiene un gran aroma a película de Hollywood, el apartado sonoro no iba a ser menos. Y es que si el famoso Hans Zimmer está detrás, que aunque no ha compuesto toda la banda sonora sí que ha colaborado, creo que sobran las palabras. A eso añadimos la fantástica elección de cada sonido y música para cada momento, incluyendo la misma ausencia de todo ello para crear angustia e intriga, y los efectos sonoros dignos de toda superproducción.
Edición española
Como todo juego digno que se precie, todo el contenido del título llega en castellano, y como toda producción de EA, los diálogos también. Y como Crysis 2 se ha hecho a lo grande y en plan hollywoodiense, el doblaje no iba a ser menos. Eso sí, solo una pega, y es que hay ocasiones en las que algunos diálogos no se escuchan del todo.
En definitiva
Lo que cabe decir es lo que vengo diciendo durante todo el análisis. El listón para Crysis 2 estaba muy, pero que muy alto, y eso es un lastre que ya arrastras desde antes de salir al mercado. Sin embargo, hay que aplaudir el trabajo de Crytek, porque aunque no ha conseguido superar a la primera entrega (tarea casi imposible), sí que ha conseguido mantenerse al nivel a base de recuperar lo bueno del juego original y de dar un giro presentando el juego como un secuela pero con novedades y perspectiva diferentes. Además, si lo que se busca es un shooter de ritmo frenético, espectacular y con infinidad de alternativas, Crysis 2 es el juego perfecto.
Lo mejor: técnicamente es de sobresaliente, su espectacularidad, que haya diferentes alternativas en cada misión, la campaña es larga, el multijugador cumple.
Lo peor: A veces la IA se queda pillada, no está a la altura de Crysis.
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Horas jugadas: 15
Jugabilidad: 8 Gráficos: 9 Música y sonido: 8.5 Modo multijugador: 7.5 Edición española: 9 Historia: 8.5 Nota final: 8.5
