En Newsday y otros muchos medios están informando del acuerdo alcanzado entre el nieto de la escritora, Matthew Prichard, y una productora no desvelada para llevar al terreno de los videojuegos cinco libros clásicos de entre los 79 que produjo. Los lanzamientos se producirían a lo largo de los próximos seis años, aunque no se han dado más detalles acerca de los mismos.