No al menos en sus funciones de 3D, según afirma la propia Nintendo en un
comunicado que PCMag ha tenido a bien traducir. Según la compañía, la visión todavía en desarrollo de los más pequeños podrían verse perjudicada por el uso de la tecnología 3d sin gafas que será el reclamo de su nueva portátil. Para mejorar la seguridad, la consola incorporará un control parental para que sean los padres quienes veten esta opción a los niños pequeños y, en cualquier caso, un adulto tampoco deberá estar más de treinta minutos seguidos ante la pantalla sin tomar una pausa.